Los exoesqueletos han llegado como una alternativa para mejorar la calidad de vida de quienes padecen algún problema de movilidad.

Esta impresionante tecnología que hace algunos años solo podían ser apreciadas en películas de ciencia ficción, ahora son una realidad, una excelente noticia, en especial para la población infantil que presente atrofia muscular.

Qué es un exoesqueleto mecánico

Esta es una estructura metálica muy diferente a los accesorios de seguridad que puede proponer un cerrajero, de hecho es similar a una moderna armadura que se incorpora al cuerpo de quien lo requiera, y permite a su usuario realizar actividades que son imposibles de ejecutar sin ella.

La tecnología que emplea esta estructura es como un robot que se incorpora en el cuerpo para que siga todos los movimientos de quien lo utilice sin necesidad de cirugías, es como vestir una prenda adicional, pero que ofrece la posibilidad de caminar o cargar pesos sin afectar la espalda.

El primer exoesqueleto infantil

El Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) presentó en el año 2016, en la ciudad de Madrid, un exoesqueleto orientado a ayudar a niños entre 3 y 14 años de edad, que presentaran atrofia muscular espinal (AME).

Esta estructura tiene un peso de 12 kilos, está elaborado en aluminio y titanio, y es el resultado de una investigación multidisciplinar entre CSIC y la empresa Marsi Bionics, así como los hospitales Ramón y Cajal de Madrid, y San Juan de Dios en Barcelona.

Aparte de la colaboración de la Fundación para la Atrofia Muscular Espinal en España y familias afectadas, que han sido parte de las pruebas y ensayos que han permitido desarrollar esta tecnología, y adaptarla a las necesidades de los niños.

El exoesqueleto presenta unos largos soportes que se adaptan a las piernas y al tronco del usuario, y con ayuda de sus motores, es posible realizar los movimientos y percibir la fuerza necesaria para poder caminar. Además tiene sensores y un controlador de movimientos, aparte de una batería que ofrece una autonomía de 5 horas.

Vale destacar que llevar a cabo este proyecto ha sido todo un reto, porque los exoesqueletos para adultos son más fáciles de ajustar, en cambio para los niños, se debe considerar muchos aspectos, entre ellos el crecimiento.

El proyecto ya es una realidad

Luego de años de iniciar el desarrollo de este proyecto y los ensayos clínicos pertinentes, la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios ha dado la aprobación para que esta estructura pueda ser comercializada en España y el resto de los países europeos.

Este logro fue el momento propicio para recordar que este hermoso proyecto comenzó cuando García Armada, investigadora científica en el Centro de Automática y Robótica del CSIC conoció un matrimonio y a su hija Daniela, una niña tetrapléjica que en ese momento tenía tan solo 6 años de edad. Luego de mucho trabajo y con el apoyo del Ministerio de Economía Competitiva (MINECO), lograron construir el prototipo que solo esperaba por ser probado por un niño durante un periodo de un año. Y los resultados fueron satisfactorios, de hecho la esperanza de la compañía es que esta tecnología esté al alcance de la sociedad

Por admin